Em Outubro de 2010 o Congresso do partido-único (PCC) decidiu retomar a tese e avançar com algumas medidas naquele sentido. Mas os fantasmas que povoam as mentes dos legisladores e alguma incompetência à mistura geram uma confusão pouco estimulante. Da economia planificada para a economia desfigurada, o caminho revela-se árduo de percorrer.
«¿Qué está permitido o qué no?. La confusión es tal que la emisora oficial Radio Rebelde abrió el micrófono al público durante varios días, con expertos del ministerio de Trabajo en la cabina.
Hilda llamó desde Camagüey para que le "orientaran" qué puede o no vender en su merendero; Maribel, de Granma, preguntó si para elaborar dulces debe llevar autorización de la escuela donde es maestra; y Adrián, de Holguín, si puede salir a ratos del taller y dejar a su ayudante vendiendo el calzado.
Pese a la incertidumbre, unos 85.000 cubanos pidieron un permiso de trabajo por cuenta propia desde que Raúl Castro lo autorizó en 178 oficios, en un intento de dar salida a los 500.000 empleados que, en una primera fase, serán despedidos del sector estatal hasta marzo.
En las oficinas de licencias, funcionarios aún piden requisitos y numerosos documentos que antes exigían para los contados negocios por cuenta propia. "Dos fotos y carné de identidad. ¡Nada más!", se cansan ahora de repetir las autoridades.
El gobierno intenta presentar la nueva apertura de licencias como un cambio de mentalidad. "Debemos defender los intereses de los trabajadores por cuenta propia, igual que hacemos con cualquier otro ciudadano (...) Hay que transformar conceptos erróneos e insostenibles acerca del socialismo", dijo Raúl Castro en un discurso en diciembre pasado».
Sobre estas medidas, publiquei AQUI um artigo mais desenvolvido, noutra oportunidade.
O texto em castelhano foi recortado em diario de cuba
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